Realiza un viaje fascinante por el norte de Lanzarote y descubre sus tesoros ocultos. Desde el Mirador de Las Nieves hasta el Volcán de la Corona, cada parada revela la genialidad de César Manrique en un entorno volcánico único.
Comenzamos en el Mirador de Las Nieves, cuyas vistas panorámicas abarcan el centro- norte de la isla y el Archipiélago Chinijo. Tras maravillarnos con el paisaje, nos dirigiremos al Volcán de la Corona, donde podrás disfrutar de las vistas del artífice de las dos grandes obras de César Manrique en Lanzarote: el cráter que originó la Cueva de los Verdes y Los Jameos del Agua.
La Cueva de los Verdes genera la impresión de estar entrando en las entrañas de la Madre Tierra y los Jameos del Agua, la primera obra maestra de César Manrique, se formó por el colapso del techo de un túnel volcánico. De sus 6 km de longitud, al menos 1.5 km discurren bajo el océano Atlántico, creando un escenario fantástico y surrealista. En él habita una especie única y endémica de cangrejos que se caracteriza por ser ciega, albina y de menos de un centímetro.
Al ascender por la escalera esculpida en la piedra, te sumergirás en el ingenio arquitectónico de Manrique en el Jameo Grande. Una piscina de aguas cristalinas rodeada de flora autóctona, un auditorio único en el interior del tubo volcánico y la suavidad de la iluminación crean un escenario mágico para conciertos y espectáculos. ¡Una experiencia imperdible para los amantes de la arquitectura, la naturaleza y la historia volcánica!
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